Bilal llega a Babel en busca de unos primos que no conoce. Al llegar, descubre que corre un rumor inexplicable: “¡No se puede reír! Reír es malo y además es contagioso”. Bilal pregunta, pero nadie le sabe responder el porqué de una prohibición tan absurda. Tendrá que desmontar el rumor y hacer frente a las dificultades que le pone Manelic, que tiene manía a los extranjeros y a la barrendera, que no deja de hacer correr rumores por todas partes. Junto con la valiente Marina, la ayuda de la Abuela Cosquillas y otros habitantes del pueblo, Bilal luchará para devolver la risa al pueblo.